En la entrada de hoy, queremos dejar clara la diferencia entre las aguas duras y blandas. Y con esta última parte, dejar zanjada la redacción de la concentración de cal dentro del agua.
Si no has leído nuestras dos entradas relacionadas, te aconsejamos que leas «Consecuencias de la cal en el agua» y «Por qué utilizar un descalcificador«.
Si ya las has leído, entonces, adelante, sigue leyendo para enterarte acerca de:
La dureza del agua
¿Qué es la dureza del agua?
La dureza del agua es la concentración de compuestos minerales que hay en una determinada cantidad de agua, en concreto, a la suma de sales de magnesio y calcio. El agua denominada comúnmente como “dura” tiene una elevada concentración de dichas sales y el agua “blanda” las contiene en muy poca cantidad. La Organización Mundial de la Salud indica que la dureza del agua no produce ningún efecto pernicioso para la salud de las personas. Pero si es importante conocer este dato para poder ajustar el funcionamiento de algunos electrodomésticos como lavadoras y lavavajillas, ya que la utilización de jabón deberá ser mayor cuando estemos en lugares con agua “dura”. En estos lugares la aparición de espuma es mucho menor, ya que el calcio y el magnesio reaccionan con los compuestos que forman el jabón y dejan de ser efectivos.
¿Cómo se genera el agua dura?
Los minerales en el agua se dan debido a un proceso de formaciones geológicas. Las aguas subterráneas que atraviesan acuíferos carbonatados. Son las que presentan mayor dureza y dichos acuíferos están formados por carbonatos de calcio y magnesio. Por otro lado, las aguas subterráneas procedentes de acuíferos con composición silicatada (p.e. granitos) dan lugar a un agua blanda, es decir, con cantidades muy bajas de sales de calcio y magnesio.
Clasificación del agua por su dureza.
Por su dureza hay que distinguir varios tipos de agua:
- Aguas blandas: Menos de 50 mg/l de carbonato cálcico.
- Aguas duras intermedias: Entre 50-100 mg/l de carbonato cálcico.
- Aguas duras: Entre 100 y 200 mg/l de carbonato cálcico.
- Aguas muy duras: Más de 200 mg/l de carbonato cálcico.
Si vives en una zona con alta concentración de cal en el agua. Puedes optar por soluciones como un descalcificador. En esta entrada puedes ver una de las mejores opciones del mercado.